

Jurado en juicio de Combs alcanza veredicto parcial y seguirá deliberando
Un jurado llegó a un veredicto parcial el martes en el juicio por tráfico sexual contra Sean "Diddy" Combs, pero el panel no logró acuerdo sobre el cargo de asociación ilícita, el más grave contra el magnate musical, y el juez ordenó continuar las deliberaciones.
En una nota al juez Arun Subramanian, el jurado no especificó si el veredicto en cuatro de los cinco cargos contra Combs, de 55 años, fue de culpabilidad o inocencia.
"Hemos llegado a un veredicto sobre los cargos 2, 3, 4 y 5. No podemos llegar a un veredicto sobre el cargo 1 debido a que tenemos jurados con opiniones difíciles de conciliar", señala el texto.
El juez ordenó a los 12 neoyorquinos, que sellarán la suerte de Combs, continuar las deliberaciones, pero dio por finalizada la jornada hasta el miércoles.
El cargo 1 es el de asociación ilícita, por el que Combs es acusado de ser el cabecilla de una organización criminal que obligaba a mujeres a participar en maratones sexuales con prostitutos, y conlleva una pena máxima de cadena perpetua.
Combs enfrenta además dos cargos de tráfico sexual y dos cargos de transporte con fines de prostitución.
La fama de Combs sufrió un duro golpe cuando su expareja por 11 años, la cantante Casandra "Cassie" Ventura, presentó una demanda acusándolo de violación y agresión sexual.
Ese caso se resolvió extrajudicialmente por 20 millones de dólares, pero desencadenó una avalancha de demandas civiles y, finalmente, cargos penales.
El juicio de Combs, que duró siete semanas, incluyó testimonios por momentos perturbadores, además de miles de páginas de registros telefónicos, financieros y audiovisuales.
Un elemento central de la acusación es que Combs lideraba una organización criminal de empleados de alto rango que "existían para satisfacer sus necesidades" y ejercía su poder con delitos como trabajos forzados, distribución de drogas, secuestro, soborno, manipulación de testigos e incendios provocados
Sin embargo, el abogado defensor Marc Agnifilo subrayó que ninguno de estos individuos testificó contra Combs ni fue nombrado cómplice.
Para condenar a Combs por asociación ilícita, el jurado debe determinar que la fiscalía demostró más allá de toda duda razonable que acordó con personas de su organización cometer al menos dos de los ocho delitos que conforman la acusación de crimen organizado.
Los ocho hombres y las cuatro mujeres deben llegar a una decisión unánime sobre cada cargo.
— "No es un dios" —
Combs está acusado de tráfico sexual de dos mujeres: Ventura y una mujer que testificó bajo el seudónimo de Jane.
Ambas mantuvieron una relación con Combs y testificaron sobre abuso, amenazas y sexo coercitivo con desgarradores detalles.
Si bien los abogados de Combs admitieron que en ocasiones éste golpeaba a sus parejas, insistieron en que la violencia doméstica no constituye tráfico sexual ni crimen organizado.
Agnifilo se burló de la imagen que pintaron los fiscales de un hombre violento y dominante que fomentaba "un clima de miedo".
Combs es un "empresario negro exitoso y autodidacta" que tuvo relaciones románticas "complicadas" pero consensuadas, afirmó Agnifilo.
La defensa analizó minuciosamente los relatos de Ventura y Jane e incluso se burló de ellos algunas veces, diciendo en que las mujeres eran adultas que tomaban decisiones libres.
Pero en su alegato final, los fiscales arremetieron contra la defensa, afirmando que el equipo de Combs había "tergiversado los hechos indefinidamente".
La fiscal Maurene Comey declaró al jurado que, cuando Combs cometió sus delitos más evidentes, "había sobrepasado tanto el límite que ni siquiera podía verlo".
"En su mente, era intocable", afirmó Comey. "El acusado nunca pensó que las mujeres a las que abusó tendrían el valor de decir en voz alta lo que les había hecho".
"Eso se acaba en este tribunal", dijo. "El acusado no es un dios".
Combs se declaró inocente de los cargos y decidió no testificar, una estrategia de defensa común en Estados Unidos. Sus abogados no tienen que demostrar la inocencia de su cliente, sino sembrar dudas entre los miembros del jurado sobre las acusaciones de los fiscales.
R.Ríos--ECdLR