El Comercio De La República - Vuelve la calma al sur de Siria tras una semana de violencia que dejó 1.000 muertos

Lima -
Vuelve la calma al sur de Siria tras una semana de violencia que dejó 1.000 muertos
Vuelve la calma al sur de Siria tras una semana de violencia que dejó 1.000 muertos / Foto: OMAR HAJ KADOUR - AFP

Vuelve la calma al sur de Siria tras una semana de violencia que dejó 1.000 muertos

La provincia de Sueida, en el sur de Siria, recuperaba una calma relativa el domingo, según informaron una oenegé y corresponsales de AFP, después de una semana de violencia entre combatientes drusos y grupos rivales que dejó más de 1.000 muertos.

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El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH), contabilizó más de 1.000 muertos desde el comienzo de los enfrentamientos, que estallaron el 13 de julio entre grupos drusos y beduinos sunitas en la región de Sueida.

Los enfrentamientos provocaron el desplazamiento de 128.000 personas, informó este domingo la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).

Presentes en las afueras de esta ciudad predominantemente drusa, periodistas de AFP informaron que no se produjeron enfrentamientos en la mañana, mientras que los convoyes humanitarios se preparaban para entrar.

Desde la medianoche, "Sueida ha estado relativamente tranquila", dijo el OSDH, añadiendo que las fuerzas de seguridad habían bloqueado las carreteras que conducen a la provincia para impedir la llegada de combatientes tribales.

El Gobierno anunció el fin de los combates en la ciudad de mayoría drusa, que había sido tomada por grupos de esta minoría religiosa, y el Ministerio del Interior anunció durante la noche que se evacuaron de la ciudad a todos los combatientes tribales y que habían cesado los enfrentamientos.

Un portavoz del Consejo Sirio de Tribus y Clanes confirmó a Al Yazira que los combatientes habían abandonado la ciudad "en respuesta al llamado de la presidencia y a los términos del acuerdo".

El presidente interino Ahmad al-Chareh, que llegó al poder tras derrocar al presidente Bashar al-Assad en diciembre, reafirmó el sábado su compromiso de proteger a las minorías y destacó "el importante papel desempeñado por Estados Unidos, que confirmó su apoyo a Siria".

El enviado especial de Estados Unidos para Siria, Tom Barrack, afirmó este domingo que el país se encuentra en una "momento crítico", por lo que pidió que "prevalezcan la paz y el diálogo".

El anuncio del alto el fuego por parte de Damasco se produjo pocas horas después de que Washington dijera que había negociado una tregua entre Israel y Siria para evitar una escalada.

Israel bombardeó posiciones gubernamentales en Sueida y Damasco a principios de semana.

El sábado, Damasco anunció un alto el fuego en la provincia de Sueida y comenzó a redesplegar fuerzas con el objetivo de restablecer la paz.

- 128.000 desplazados -

El gobierno ya había desplegado sus fuerzas el martes en Sueida, antes de retirarlas tras los bombardeos israelíes.

Israel afirma que quiere proteger a la minoría drusa y que se siente amenazado por la presencia de fuerzas gubernamentales cerca de su frontera. Fue entonces cuando se acordó un alto el fuego entre Siria e Israel, bajo la tutela de Estados Unidos.

El domingo, convoyes humanitarios se preparaban para entrar en la ciudad, según corresponsales de AFP. Pero todavía no ha llegado ninguna ayuda médica o humanitaria, según un médico local.

Los habitantes, confinados en sus casas, no tienen electricidad ni agua y empiezan a escasear alimentos.

"Hasta la fecha, un total de 128.571 personas han sido desplazadas desde el inicio de las hostilidades", señala un informe de la OIM, precisando que los desplazamientos de la provincia de Sueida "aumentaron considerablemente el 19 de julio, con más de 43.000 personas desplazadas en un solo día".

Imágenes de AFP mostraron el sábado a combatientes tribales en Sueida, algunos con el rostro enmascarado, disparando armas automáticas.

Un corresponsal de AFP vio decenas de casas y coches incendiados y hombres armados prendiendo fuego a tiendas tras saquearlas.

El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, instó a Damasco a "pedir cuentas y llevar ante la justicia a los culpables de atrocidades, incluidos los de sus propias filas".

Las autoridades sirias deben utilizar "sus fuerzas de seguridad para impedir que el Estado Islámico y otros yihadistas violentos entren en la región y perpetren masacres", escribió en X.

El grupo Estado Islámico se había hecho con el control de amplias franjas del territorio sirio e iraquí antes de ser derrotado en 2019. Pero mantuvo su presencia, principalmente en el desierto sirio.

La nueva violencia entre comunidades debilitó aún más el poder de Chareh, en un país marcado por casi 14 años de guerra civil.

En abril, los combates mataron a más de 100 personas y en marzo, las masacres dejaron más de 1.700 muertos, según un informe del OSDH.

La comunidad drusa de Siria contaba con unas 700.000 personas antes de la guerra civil. Esta minoría también está presente en Líbano e Israel.

S.Salazar--ECdLR