La OMS establece directrices globales inéditas para combatir la infertilidad
La Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó el viernes por primera vez directrices globales para mejorar la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de la infertilidad, que afecta a millones de personas en el mundo.
"A nivel mundial una de cada seis personas se enfrenta a la infertilidad a lo largo de su vida. Este problema afecta a individuos y parejas de todas las regiones y niveles de ingresos, y, sin embargo, el acceso a cuidados seguros y asequibles sigue siendo muy desigual", destacó ante la prensa Pascale Allotey, directora del departamento de Salud Sexual y Reproductiva de la OMS.
"Esta guía propone un marco unificado y basado en pruebas para garantizar que la atención en fertilidad sea segura, eficaz y accesible para todos quienes la necesiten", añadió.
La OMS define la infertilidad como la incapacidad de lograr un embarazo tras 12 meses o más de relaciones sexuales regulares sin protección.
Esta situación puede generar angustia, estigmatización y dificultades económicas.
En muchos países los exámenes y tratamientos de la infertilidad recaen sobre los pacientes, lo que a menudo conlleva gastos "catastróficos", detalla la OMS.
"En algunos contextos un solo ciclo de fecundación in vitro (FIV) puede costar el doble del ingreso anual promedio de un hogar", subraya.
El viernes la OMS publicó 40 recomendaciones que abogan por la integración de la fertilidad en las estrategias, servicios y financiamiento nacional de salud.
También establecen directrices sobre las etapas de una atención clínica efectiva, tanto en el diagnóstico como en el tratamiento.
La organización hace hincapié en los diagnósticos masculinos, que a menudo no se realizan.
También ofrece orientaciones que van desde estrategias de gestión más sencillas hasta tratamientos complejos como la inseminación intrauterina o la fecundación in vitro.
Además, recomienda una mayor inversión en prevención para abordar los principales factores de riesgo de infertilidad, como las infecciones de transmisión sexual no tratadas y el tabaquismo.
La OMS anima a cada país a "adaptar estas recomendaciones a sus contextos locales y a hacer seguimiento de los avances logrados".
P.Peña--ECdLR