

Starbase, una ciudad al pie de la base espacial de Musk y al lado de refugios silvestres
Poco antes del despegue del megacohete Starship, delfines juguetean frente a las costas del sur de Texas. La ignición estremece a Starbase, la nueva ciudad erigida allí por Elon Musk.
El hombre más rico del mundo, que acaba de dejar el liderazgo del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) en el gobierno de Donald Trump, no perdió el tiempo en sus planes paralelos de conquistar Marte desde su compañía SpaceX.
Decenas de automóviles circulan a toda velocidad por el estrecho bulevar Boca Chica, en dirección a la base espacial. En el camino se divisa un busto de Elon Musk con la mejilla aparentemente vandalizada y cubierta con una especie de parche.
Parte del plan del multimillonario de colonizar Marte era la creación de Starbase. Situada en la bahía de Boca Chica, cerca de la frontera con México, creció en torno a las instalaciones de SpaceX y se convirtió oficialmente en una ciudad tras una votación popular a inicios de mayo.
Casas prefabricadas pintadas de negro, blanco y gris tienen como telón de fondo el imponente edificio corporativo con el emblema X. Modelos de dos inmensos cohetes lanzadores y una nave espacial se pueden apreciar a kilómetros de distancia.
Los terrenos pertenecen en su mayoría a la compañía. Unos 500 residentes tienen viviendas con un patio para colocar sillas de descanso y parrillas.
Otro tanto aún vive en casas rodantes mientras se construyen más casas. Se escucha el martilleo de obreros y el movimiento de maquinaria. La ciudad en crecimiento está rodeada de naturaleza y vida silvestre, sobre todo aves.
"Creo que es genial construir una ciudad entera alrededor de una base de lanzamiento. Quizás me mude aquí algún día. Me encantaría ir a Marte, ¿a quién no?", dice Dominick Cárdenas, un ingeniero en computación de 21 años, quien llegó a ver el accidentado vuelo de prueba número 9 de Starship, que explotó a fines de mayo.
Pero no todos celebran.
"Musk no debería estar aquí, es un colonizador", señala Christopher Basaldú, doctor en antopología sociocultural y miembro de la tribu originaria Carrizo/Comecrudo.
"La tierra aquí es sagrada para habitantes originarios del lugar. Y SpaceX está contaminando y profanando esta tierra", afirma.
- Inversiones -
AFP intentó sin éxito obtener un comentario del alcalde de Starbase, Bobby Peden, vicepresidente de pruebas y lanzamientos de SpaceX, o de las autoridades del condado de Cameron, jurisdicción donde se localiza la nueva ciudad.
Una audiencia para discutir la adaptación de nuevas áreas está programada para fines de junio, y el administrador de la ciudad advirtió que algunos residentes pueden perder el derecho de usar su propiedad tal como lo hacen ahora, según un documento obtenido por la televisora CNBC.
SpaceX tiene además el proyecto de complejos comerciales RioWest, avaluado en unos 15 millones de dólares, de acuerdo con solicitudes hechas en 2024.
Una planta de la empresa Rio Grande LNG (Gas Natural Licuado) se construye en la vecina ciudad de Brownsville. Este tipo de instalaciones puede procesar metano, combustible de la Starship.
Para Bekah Hinojosa, cofundadora de la Red de Justicia Ambiental del Sur de Texas, esta planta puede convertirse en la estación de combustible de Musk.
- "David contra Goliat" -
Hinojosa recuerda que en la zona donde opera SpaceX hay dos refugios federales de vida silvestre: el del Valle Bajo del Río Grande y el de Laguna Atascosa.
Además, está la playa Boca Chica, donde por décadas los residentes veranean y que ahora se cierra cada vez que hay vuelos de prueba.
"Se supone que no debe haber cohetes explotando cerca de humedales y hábitat prístinos", explica.
En 2024, la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos sancionó a SpaceX por derrames y descargas de líquidos en humedales conectados con el Río Grande.
Ese mismo año, Kathryn Lueders, gerenta general de SpaceX, envió una carta a las autoridades del condado Cameron, en la que aseguró que, más allá de la creación de la ciudad, continuarán mitigando los efectos ambientales que la base espacial tiene en la zona.
A principios de mayo, la compañía recibió la aprobación de la Administración Federal de Aviación para aumentar los lanzamientos anuales de cinco a 25.
Para Hinojosa, esto es como una lucha de "David contra Goliat".
"Somos una de las comunidades más pobres del país (...) con bajos ingresos y estamos lidiando con el mayor abusador del planeta, Elon Musk (...) Hemos estado presentando demandas, pero él tiene tanto poder que ha encontrado la manera de evadir la mayoría", agrega.
F.Quispe--ECdLR